Al amparo de la tarde, que declina lentamente, sepultando el poderío de su luz en Occidente, donde ostenta el sol la sangre de su túnica imperial, y a través de la floresta deliciosa, cuya trama es un palio de berilos rumorosos, se derrama el clarísimo torrente roto en hebras de cristal. Bajo el rústico tejido de una endeble pasarela van formando los raudales un arroyo donde riela la agonía del crepúsculo con su trémulo fulgor, y la linfa transparente, mientras corre por su lecho, va diciendo estas palabras con dulcísimo rumor: -Soy el agua cristalina; con mis besos van las flores transformando sus capullos en corolas de colores que dan vida y dan aromas al ambiente del vergel, y, al nacer alegremente las mañanas del estío, son joyeles de brillantes mis ofrendas de rocío en los pétalos carnosos de la rosa y el clavel. A la sombra del oasis, mi corriente limpia y pura es caricia y es consuelo y es torrente de frescura que amortigua dulcemente la fatiga y el calor de los pobres peregrino...
Ole!!! mi chica....toda una poetisa !!!
ResponderEliminarAncha y larga es Castilla, tu mundo es Blanes pero debes de ver algo mas cuanto menos de nuestra maravillosa España !!!
Algún día la veré entera.
ResponderEliminarHola:
ResponderEliminaresa poesia es preciosa y ademas de agradecida.
Bonito modo de describir el sentimiento que compartimos la mayoria de los Blanenses.
ResponderEliminarReflejado en las aguas azules de la Costa Brava nace el pueblo de mis sueños, las raices de mi alma. Su emblema La Palomera, erguida junto a su playa y la torre de San Juan que domina su montaña. Blanes pueblo adorado fortaleza de mi ser, espacios abiertos al aire aliento de mi niñez.
Muackis